LA CAMIONETA

Esta mañana enciendo la tele y me encuentro, en una noticia sobre el último ataque de tropas estadounidenses en Irak, un vídeo en el que se ve una camioneta abierta (un pick-up), vacía de carga, conducida por un solo hombre, en el punto de mira de un artefacto de matar. El vehículo se ve desde atrás mientras circula por una carretera. Al cabo de unos instantes, la imagen se emborrona por una explosión que devasta todo lo que se veía por la mira. Me quedo estupefacto. El vídeo era emitido, junto a otros, a modo de "adorno" de lo que decía la locutora, quien no hace mención expresa de las imágenes.

La noticia incluía frases y palabras "mágicas" como: "... ataque llevado a cabo por tropas estadounidenses junto a tropas irakíes...", "rebeldes", "contrabando" o "terroristas", que da igual cómo se digan: al oírlas, como por sortilegio, uno se siente extrañamente tranquilizado.

Pero la imagen vuelve a mi memoria y ejerce el efecto contrario al de las palabras: me identifica con el conductor y me hace sentir que algo no está bien, que hay algo injusto en lo que me han mostrado; que podría ser yo ese hombre sorprendido cobardemente por la espalda, probablemente sin tener nada que ver con lo que estaba sucediendo; ese hombre cuya memoria encima es arrastrada por medio mundo, por informadores frívolos e ignorantes, como si de un delincuente se tratase... Y me da el ataque inútil de ira, y escribo esto, que no sirve ni para limpiarse el culo, a no ser que se imprima...

Camioneta sin carga, hombre solo, destruida, muerto...