Y a mí, ¡cómo no! La primera te transporta muy atrás en el tiempo, la segunda deslumbra por irreal (la belleza en la realidad siempre lo hace) y la tercera ha seguido haciéndome retroceder.
Por cierto, me ha traído a la memoria aquella imagen de Kim Novack en el bosque de las sequoyas gigantes. Ella, tan hermosa, apoyada contra un tronco milenario, y aquel impagable galán, un verdadero caballero en la vida real, James Stewart, mirándola como pocas veces mira un hombre a una mujer. (Este Hitchcock...)
3 comentarios:
Powerfull!
Me encanta...!
Supongo (por lo visto) que sonríes!
un abrazo!
Y a mí, ¡cómo no! La primera te transporta muy atrás en el tiempo, la segunda deslumbra por irreal (la belleza en la realidad siempre lo hace) y la tercera ha seguido haciéndome retroceder.
Por cierto, me ha traído a la memoria aquella imagen de Kim Novack en el bosque de las sequoyas gigantes. Ella, tan hermosa, apoyada contra un tronco milenario, y aquel impagable galán, un verdadero caballero en la vida real, James Stewart, mirándola como pocas veces mira un hombre a una mujer. (Este Hitchcock...)
Buenas y ventosas tardes mediterráneas, Glo.
Gracias, lena... Hay que seguir adelante...
Hola, mertxe. En efecto, la tercera es una imagen del Sequoia National Park. Has acertado.
:)
Publicar un comentario