6.10.07
PIXIE Y DIXIE
Cruceros gemelos Vizcaya (izquierda y centro) e Infanta María Teresa (derecha), acribillados a cañonazos y calcinados frente a la embocadura del puerto de Santiago de Cuba (abril de 1898).
...
Lamentablemente yo, que disfruté tanto de esa serie de dibujos animados, he llegado a la desagradable conclusión de que su origen es la guerra de Cuba, pues es evidente que los ratones son Cuba y Puerto Rico (aunque uno de ellos hable mexicano), mientras el gato es España.
Hay que tener en cuenta que la propaganda de guerra de Estados Unidos nunca se "deshizo" oficialmente, de forma que las mentiras y medias verdades de aquel episodio histórico se mantienen incluso hasta hoy. De hecho, hay páginas de puertorriqueños que revisan ese episodio histórico y pretenden deshacer las injurias que se profirieron sobre España y su ejército de entonces, y que circulan en la "vox pópuli" de Estados Unidos y Puerto Rico, aunque creo que con bastante poco éxito, pues sus reivindicaciones se asocian casi siempre a intereses separatistas para con Estados Unidos.
Las consecuencias de aquella guerra fueron mucho más importantes para Cuba, ya que aunque nadie mencione esto abiertamente, Fidel Castro (que de tanto oirle el nombre ya no nos suena requetegallego), no sólo es un "patriota cubano", sino un "español resentido" con aquella pérdida, que también afectó profundamente, por cierto, a personajes como Machado (quien jamás menciona el hecho directamente en su obra).
Pero, curiosamente, donde con más rapidez olvidamos aquellos acontecimientos fue, precisamente, en España, sobretodo por la Guerra Civil y la posterior dictadura, así que los de Hanna-Barbera (o quizá mejor Barberá) no tuvieron mucha dificultad para "colarle" la serie (originalmente dirigida al mundo hispanohablante americano) a los programadores de TVE de entonces.
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4 comentarios:
Lo que desconoce buena parte del personal es que la guerra de Cuba fue azuzada por William R. Hearst
buscando un aumento desmesurado de ventas de su diario el 'New York Journal', junto con la ineptitud de los responsables políticos y militares españoles, no previeron el problema del abastecimiento de carbón para los buques de la época con mucha obra viva y por tanto un enorme consumo, por lo que al negársele a nuestra flota el repostaje en territorios cercanos a Cuba hubieron de entrar en la bahía de Santiago, a sabiendas de que era una ratonera, lo lógico hubiera sido carbonear previamente y plantear la batalla en mar abierto, pero las órdenes llegadas de la península no pudieron ser más descabelladas y el resultado ya lo conocemos.
En la página de un Puertorriqueño leí que no sólo hubo un problema de abastecimiento de carbón, sino que algunos de los cañones no funcionaban por incompatibilidad con la munición. Al parecer los buques más modernos eran de excelente calidad, pero la intendencia no estuvo a la altura.
De todas formas, la desigualdad de las escuadras que participaron en la contienda debió ser importante.
Yo, cansado de que la historia que aparecía en los medios y que contaban los políticos terminase en la proclamación de la segunda república, abordé con entusiasmo este episodio, relativamente reciente, y que además en cierta manera me tocaba personalmente. Fue una satisfacción comprobar que había vida en el país antes de 1931.
Esto ya lo hemos comentado, ¿verdad? ;)
Hemos, hemos... :)
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