Posteriormente se le dio otro nombre, pero este edificio es el PABELLÓN ALEMÁN DE LA EXPOSICIÓN UNIVERSAL DE 1929. Las sillas con respaldo estaban destinadas al rey y la reina de España, por lo que se trata de tronos.
Aunque Mies van der Rohe construyó mucho más, especialmente en su estapa estadounidense, esta obra se considera la cumbre de todo su arte.
De los muchos reportajes fotográficos que le han dedicado, me quedo con el de César Barrio, ya que incorpora EL REFLEJO Y LA TRANSPARENCIA, aspectos sin los que este espacio resulta comprensible sólo a medias.
Aunque Mies van der Rohe construyó mucho más, especialmente en su estapa estadounidense, esta obra se considera la cumbre de todo su arte.
De los muchos reportajes fotográficos que le han dedicado, me quedo con el de César Barrio, ya que incorpora EL REFLEJO Y LA TRANSPARENCIA, aspectos sin los que este espacio resulta comprensible sólo a medias.
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