Describir el lugar de nacimiento del río Ebro se ha convertido en algo complicado desde mediados de los ochenta del siglo pasado. Pero he recordado la entrada que dediqué a la presa del río Colorado en la localidad de Los Algodones, en México, que creo puede ayudar:
En aquella entrada, mostraba que el caudal habitual del Colorado se conduce por un canal lateral artificial (ramal 2), mientras el cauce natural del río (ramal 1), se mantiene seco, sirviendo como aliviadero en caso de crecida.
Pues eso mismo, aunque por medios naturales, sucede con el río Híjar: una parte del caudal se sume en el terreno, reapareciendo en Fontibre (2), donde recibe el nombre de río Ebro, mientras el caudal restante (cuando lo hay) discurre por el cauce superficial (1), reencontrándose ambos unos kilómetros aguas abajo.
3 comentarios:
Pues en otro orden de cosas te diré que, mientras leía esta entrada, en mi cabeza se han solapado dos dificultades. La que tú tratas y de la no se trata en ciertas autonomías en donde la geografía es un asunto relativo. En fin, cosas mías. (¿O no?)
Saluditos desde un espléndido Mediteráneo que hoy se ríe a carcajadas de nosotros, de la crisis, del otoño...
Había oído decir que en algunos colegios "no saben con certeza dónde nace el Ebro". Hasta ahora no había dado credito a esto porque considerar que sea cierto me produce "asco de muerte", como escribía Ortega.
Ítem mas: en Cataluña los libros de texto dicen del Ebro que es "un río catalán que nace en tierras extrañas". Y todo así. Si hay que pedir la independencia se pide, sin más, pero inventarse una historia, una mitologia, una lengua (sí, porque todos tenemos una madre común, el latín y un padre no menos importante, el griego, para calentar la cabeza a la gente me parece sencillamente deleznable. Pero, en fin, así nos va...
Publicar un comentario