Hoy he encontrado este desagradable anuncio en mi administrador de correo:
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Conociendo cómo funciona la saturada administración pública de Madrid, espero que las mujeres maltratadas se lo piensen dos veces antes de llamar a ese número. Seguramente recibirán una ayuda temporal (quizá hasta después de las próximas elecciones) y los siguientes años tendrán que bregar con las consecuencias de esa decisión ellas solas, porque los que decían ir a ayudarlas se lavarán las manos.
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Siempre habrá quien se beneficie justamente de estas medidas, pero lo más probable es que la consecuencia de esta "moda" propiciada por la administración pública, sea que aparezcan no pocas "víctimas colaterales", como lo son todos los hombres inocentes, que desde hace tiempo son tratados por la policía y los jueces como "culpables hasta que se demuestre lo contrario".
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"Ha tenido usted suerte", le decía su abogado a un conocido que acaba de separarse: "si ella le hubiese acusado de malos tratos habría salido esposado". ¿Esposado porqué?, ¿vejado porqué?...
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Y obsérvese que no se menciona a los niños. Para los promotores de la iniciativa no es importante que TU padre sea denunciado y enviado a prisión. Ellos están más preocupados por no salir en los periódicos por no hacer NADA en los casos flagrantes de violencia.
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