Las relaciones de los occidentales con China fueron, desde el primer momento, clara y exclusivamente comerciales. San Francisco Javier pretendía más, pero terminó sus días en un pequeño puerto provisional de la costa de Cantón, sin haberlo conseguido.
Puramente comercial fue el cometido de este emplazamiento de Macau, y realmente, ¿para qué complicar más las cosas, si sólo éso importa?
2 comentarios:
Con el paso de los siglos tampoco China nos interesa, si no es desde el punto de vista comercial o industrial, según se mire. Ahora bien los los empresarios chinos han puesto sus ojos en muchas de nuestras empresas, como ciertas bodegas riojanas.
Saludos.
Un saludo, Nómada.
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