9.12.12

ZOLINA, UNA Y OTRA VEZ







Fotos de distintos autores. La luz del lugar invita. También sus soledades.

Las aguas de esta balsa son salobres. Se almacenaban aquí como parte de un proceso industrial de extracción de sal, resto de un antiguo mar desaparecido. La industria cerró en los años ochenta, pero la balsa se mantuvo, siendo destinada a lugar de descanso de aves silvestres.

2 comentarios:

Mertxe dijo...

Son fantásticas estas fotografías. Dan paz.

Glo dijo...

Sí.

:)