4.6.13

LA BELLEZA MÁS DELICADA DE LA CASTELLANA

 

Este edificio de Rafael de la Hoz es una de las delicadezas de la cada vez más dura Castellana. Delicada es la relación geométrica "inestable" que guarda con su entorno (la más "sólida", con la calle General Martínez Campos); delicada es su sorprendente y amenazadora "levitación", y delicada es su doble piel "desmaterializadora", que lo vuelve como borroso, dotándolo de una tonalidad verdosa, fresca, acuática... Al menos yo, cuando lo veo, pienso en el agua.

 

2 comentarios:

Nómada planetario dijo...

Todo un reto arquitectónico. No pasa desapercibido el edificio.
Como diríamos en Facebook, me gusta.
Saludos.

Glo dijo...

Un abrazo, Nómada.