Los atractivos de este pub eran discretos: desde la entrada se veía un pedazo de ría y un poco de mar, allá abajo, y estaba orientado al parque pero a un nivel inferior, de manera que uno se sentía como en un rincón, protegido pero con algunas vistas; vistas que desde dentro apenas se apreciaban a través sus ventanales con vidrieras de capilla.
Hace muchos años que está cerrado, y creo que sólo estuve dentro una o dos veces, de las que apenas retuve un mobiliario de madera con tapicería de flores. No sé por qué me fijé en este local que ha pasado desapercibido a todo el mundo hasta hoy; incluso a los vándalos. Sólo el tiempo ha ido cubriéndolo de polvo y borrando el rostro del controvertido inglés que le dio su sonoro nombre.
(Ex Cromwell pub, C/ Almirante Cristóbal Mello, nº12 (con acceso desde la C/ Pedro San Martín), 48920 Portugalete, Vizcaya)
Hace muchos años que está cerrado, y creo que sólo estuve dentro una o dos veces, de las que apenas retuve un mobiliario de madera con tapicería de flores. No sé por qué me fijé en este local que ha pasado desapercibido a todo el mundo hasta hoy; incluso a los vándalos. Sólo el tiempo ha ido cubriéndolo de polvo y borrando el rostro del controvertido inglés que le dio su sonoro nombre.
(Ex Cromwell pub, C/ Almirante Cristóbal Mello, nº12 (con acceso desde la C/ Pedro San Martín), 48920 Portugalete, Vizcaya)
5 comentarios:
Es un placer poder leer algo sobre aquel mítico Cromwell de Portugalete, aquel Pub setentero tan especial, y es un placer poder recordarlo con una mezcla entre nostalgia y tristeza de ver como han desaparecido tantas referencias a una época. Frecuentado por hippys, retros, mods, y en general gente progre alternativa. Recuerdo que era un local amplio con clase, decorado con estilo inglés, acogedor, cálido y con buena música, además era ideal para quedar con gente y poder charlar además de tomar algo. Quedábamos también a veces como remate de alguna cena especial, de amigos o de colegas de trabajo. Gracias por traerlo aquí y poder volver la vista atrás y poder recordar tan bellos lugares.
Decía un profesor mío, que la ruina de las cosas debe contemplarse desde su concepción.
Gracias por la visita y el amable comentario, mina.
Recuerdo haber ido infinidad de veces con mi pareja, él se llamaba Miguel y yo Ana. 🙂. Era un sitio acogedor, muy especial. Una pena que ya esté cerrado.
Sí. Hace poco robaron la parte metálica de las letras, y el retrato de Cromwell va pareciéndose al Papa Inocencio X de Francis Bacon.
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