19.7.14

ASCENSO A LOS INFIERNOS


Imagen encontrada aquí.

Culminación y final de la carrera espacial.

5 comentarios:

Mertxe dijo...

Es verdad que estamos aquí mismo, pero es tan apasionante pensar que en unos años podremos poner pie a Marte o alguna de esas lunas acogedoras, Titán sin irmás lejos, que ya con eso me siento orgullosa de mi especie. Si un día lo logramos, la gesta humana desde que se bajó del árbol estará más que testada.

Glo dijo...

No creo que nada de eso sea viable. El final de la carrera espacial fue también el final de la exploración espacial humana, que había sido tan sólo una meta política para justificar ciertos desmanes que pasaban como "males menores" si se los comparaba con las maravillosas perspectivas de un futuro ideal, culminación del progreso (piénsese en la fantástica fusión nuclear como justificación de la devastadora fisión nuclear). Una meta que procuraba un tipo de "libertad" imposible en el confinamiento planetario.

Mertxe dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Mertxe dijo...

Me he liado. Repito: Yo sí. Firmemente. El único problema seremos nosotros mismos, porque tal como van las cosas podemos quitarnos de en medio. Llevará la tira de tiempo seguir dando pasitos por ahí afuera... y ahí afuera hay vida. Recientemente he conocido una estupenda noticia sobre este tema. Te la paso: http://www.europapress.es/ciencia/misiones-espaciales/noticia-nasa-cree-encontrar-vida-extraterrestre-alcance-20140715110204.html

Glo dijo...

Son patéticos los esfuerzos de los científicos por justificar la necesidad de su trabajo.

La perspectiva actual de la colonización de Marte es desoladora: los responsables de la misión pretenden "dejar tirados" allí a los voluntarios porque no hay dinero para traerlos de vuelta, y declaran, histéricos, que es necesario ese sacrificio (en el que ellos no participarían, claro). ¿Has visto las condiciones en las que vivirían esos infelices, encerrados a perpetuidad en esas letrinas gigantes? La locura los consumiría si fuesen tan estúpidos de ir.

Además, recordemos, por ejemplo, que el hundimiento del "Costa Concordia", con independencia de la actuación de su capitán, se debió a que una compuerta entre compartimentos estancos estaba abierta cuando debería haber estado cerrada. Es decir, que tantos cuidados, legislaciones, y ordenanzas, tantas previsiones tecnológicas contra los estragos de la pereza y la rutina, se fueron finalmente al traste porque seguía habiendo una puerta estanca abierta que debería haber estado cerrada.

Somos animales en los que la muerte va cavando su fosa en vida, no espíritus puros, como pretenden algunos puritanos hipócritas.