Hace un tiempo que dediqué una entrada al bellísimo puente del santuario de Artemisa Brauronia. Hoy voy a continuar considerando cómo esa construcción refleja aquella deslumbrante cultura:
¿Por qué construir un puente tan ancho? Pues porque había dinero para esa generosa empresa, porque el cuadrado es una figura geométrica rotunda, y porque, igual que sucede hoy en los pasos de cebra, nadie cruza a eje, sino en diagonal.
Teniendo todo eso en cuenta, el autor del puente lo concibió tratando de conseguir un sabio equilibrio entre belleza, economía y respeto hacia nuestra naturaleza humana. Que acertó, nos queda claro en las rodadas de los carros que durante miles de años cruzaron el puente de la manera más estrictamente diagonal:
Imagen encontrada aquí.
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